¿Arte o basura?

Una buena forma de reciclaje es la reutilización, o el uso de elementos ya inservibles para su uso inicial, como elementos útiles para otras cosas. Y entre estas “otras cosas” la más utilizada suele ser el adorno y la decoración.

En este caso no se trata de un adorno, más bien de lo segundo, porque además de ser útil (es un mueble), es decorativo. Aunque en alguna que otra casa puede dar más que un susto, y resultar demasiado… “impactante” o decorativo, lo cierto es que estas piezas están realmente bien hechas. Y todo ello con elementos de automóviles ya inservibles.

También hay muchas señales viales y de transito que no son utilizadas por las auoridades locales al final se convierten en simple basura. Por suerte algunos artistas les han encontrado utilidad, creando a partir de estos metales muebles funcionales, baratos y ecológicos.

El plástico, el cartón, los botes de refrescos, neumáticos, las planchas metálicas, diversos tejidos… que son enviados al contenedor acaban convirtiéndose en una fuente de inspiración decorativa que culmina, en muchas ocasiones, en obras de arte expuestas en importantes museos por todo el mundo consolidando los artistas contemporáneos del siglo XXI.

Solo es necesario mirar con otra perspectiva cada objeto que vayamos a tirar y preguntarnos ¿arte o basura?